23 de Abril de 2024

TIEMPOS EXTRAS 20/7/17

-Aficionados veracruzanos cada día más exigentes

-Por historia los escualos no hacen las mejores contrataciones

-Estela Salas se queja de boicot en Londres, culpa a un mexicano

Por Felipe García

TIEMPO REGLAMENTARIO.- Oigo y leo las quejas de los aficionados a los Tiburones Rojos de Veracruz por la simple razón de que no ven a un equipo sólido para competir en el Apertura 2017, el que está a la vuelta de la esquina y que abrirá ante los Rayos del Necaxa.

Pero platicando con un amigo, un integrante más de los “Jefes”, Polo Lascuráin, rememorábamos cuándo fue la última vez que una dirigencia escuala se armó “hasta los dientes” para agradar a su afición.

Pues bien, la última ocasión fue hace mucho tiempo y en total se pueden contar, a lo largo de la historia, con los dedos de una mano.

Una cosa está clara, nunca nadie, ni el más entusiasta está de acuerdo con lo que la dirigencia en turno hace o contrata, a todo le encontramos una razón de crítica, como si estuviéramos acostumbrados a que cada torneo se abriera la cartera para incorporaciones “bomba” o para armarse para ser campeón.

Creo que estamos desorientados, desfasados de algo al que solo tienen alcance cada año equipos como Tigres, Monterrey, América, Toluca, Cruz Azul, por mencionar a algunos de los llamados grandes.

Veracruz apuesta a que algunos de los refuerzos extranjeros, en su mayoría contratados de “medio pelo”, puedan adaptarse y “romperla” para más tarde hacer negocio con ellos, porque al final eso es el futbol.

PRIMER TIEMPO EXTRA.- Haciendo memoria solo en tres ocasiones desde que el equipo escualo volvió a la Primera División en la 89-90, se ha puesto esmero, y eso porque ha habido dinero, para hacer plantillas protagonistas, aunque tampoco ha con la garantía de que funcionaran.

En la temporada 1990-91 se integró un equipo para “campeonar” luego de salvar la categoría, tan es así que la franquicia escuala fue etiquetado, después del Draft, como el “Super Tiburón”. Esa época generó contrataciones como la de Adolfo Ríos, Víctor Medina, Pascual Ramírez, Juan Morales, Jorge Gabrich, Pedro Osorio, José Serrizuela y José Luis González China, de los mejores de la época.

Dirigido por Eduardo Antunes Coimbra, hermano del mundialista brasileño Zico, el equipo navegó en la imprecisión, no dio lo que a gente quería, más de visitante, y al técnico lo corrieron en la sexta fecha.

La otra apuesta para armar un “trabuco” fue cuando TV Azteca lo tuvo. La mejor contratación fue la del español José Mari Baquero, pero tampoco pasó gran cosa, el ibérico solo se llevó las llaves de la ciudad de Boca del Río.

De cualquier forma la crítica y la exigencia de la afición, a veces justificada en otras no tanto,  no ayudó para que el proyecto prosperara y en el torneo 1998 la franquicia descendió.

Y el proyecto más reciente, amén de que pudo haber pasajes en la historia del equipo en el que sin querer las incorporaciones funcionaron, fue con Rafael Herrerías. El empresario taurino tuvo manga ancha para contratar, a través Gustavo Parente, a la plantilla con mayor intención de ser protagonista, la del 2004.

Aquí destacaron elementos como Cuauhtémoc Blanco, Christian Giménez, el “Chaco”, Walter “Lorito” Jiménez, Gustavo Biscayzacú, Kléber Boas, Lucas Ayala, Pablo Quatrocchi, por mencionar algunos. Ese año la afición nuevamente falló, no llenó el estadio a pesar de tener al superlíder. El equipo fue echado por Pumas en cuartos de final.

Entonces, que alguien me explique porqué tanta exigencia y expectativa para una plantilla que por historia está condenada a pelear por el no descenso. Por eso lo de Reinoso se ha “cacaraqueado” tanto, porque ni siquiera estaban en planes dos liguillas y menos aún un título de Copa.

SEGUNDO TIEMPO EXTRA.-Leíamos de la cuenta del facebook de la veracruzana Estela Salas Marín, mutimedallista en lanzamiento de jabalina desde los Juegos Paralímpicos de Atenas 2004, que estando en el Mundial de Para Atletismo en Londres, Inglaterra, a un día de su prueba le desataron los amarres de la silla de competencia. Es como si a un auto le hubieran manipulado los frenos.

Lo curioso del caso es que dice que también en Río 2016 pasó lo mismo, pero lo más complejo del problema es que sospecha de un mexicano. Ya decía yo, a pesar de las circunstancias que viven estos atletas, cuya alma debiera ser blanca y pura, suele haber lobos con piel de oveja.

Y lo digo porque si hay asociaciones y federaciones conflictivas, con envidias y malas vibras, inundadas de malas personas de sonrisas hipócritas, es precisamente este gremio paralímpico.

Ánimo Estela.