-Fuentes cercanas al club jarocho aseguraron que desde hace dos semanas la directiva ha ido liquidando las deudas
AGENCIA
La historia de equipos con deudas y retrasos en pagos se repite, dos meses después de que la Liga MX se "deshiciera" de Jaguares de Chiapas, club que en los últimos dos años enfrentó problemas económicos.
Los Tiburones Rojos, propiedad de Fidel Kuri Grajales, han arrastrado dificultades monetarias en los pasados cuatro meses, las cuales ocasionaron, ya desde el término del Clausura 2017, que no pudieran cumplir con los pagos a sus jugadores, retrasándolos entre uno y dos meses.
Incluso, los adeudos provocaron que la renovación del contrato de Daniel Villalba, quien firmó hasta el 2020, se atrasara, y que al argentino tardara en reportarse con el equipo, luego de sus vacaciones por Argentina.
Y aunque fuentes cercanas al club jarocho aseguraron que desde hace dos semanas la directiva ha ido liquidando las deudas, la situación se asemeja a lo que experimentó la Liga MX con Carlos Hugo López Chargoy, quien fuera propietario del cuadro chiapaneco.
Aunado a los contratiempos económicos, el dueño del conjunto veracruzano, Fidel Kuri Grajales, cada vez cuenta con menos apoyo gubernamental, del cual gozó cuando llegó con la franquicia y mientras el Partido de la Revolución Institucional (PRI), estuvo al poder del estado.
El mismo partido lo apoyó en la elección de junio pasado para pelear por la alcaldía del municipio de Veracruz, en la cual fue derrotado por Fernando Yunes Márquez, hijo del actual gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, quien aseguró cuando entró al cargo, que quitaría cualquier apoyo económico que el club recibiera del erario público.
