-De no tener dinero en 2012 a jugar la Final de la Champions contra el Real Madrid
AGENCIA
Bien dicen que la vida da muchas vueltas y un claro ejemplo es Andrew Robertson, futbolista del Liverpool que estará en la Final de la Champions League este sábado 26 de mayo, pero que hace seis años era un adolescente desempleado.
Nacido en Escocia en 1994, la carrera de Robertson tuvo su primer tropiezo a los 15 años cuando fue cortado por las inferiores del equipo más ganador de su país, el Celtic, por ser “muy bajito”.
La incertidumbre continuó como integrante del Sub-20 del Queen’s Park escocés. Sin dinero para solventar sus gastos, el entonces jugador de 18 años expuso su desesperación en Twitter en el 2012: “La vida a esta edad es basura sin dinero #NecesitoUnTrabajo”.
Sorteando las “horas bajas” y sabedor de que se agotaba el tiempo para trascender en el futbol, suplicó lo liberaran para darse una última oportunidad. En el mercado de pases del 2013 pudo salir del Queen’s Park y contratarse con el Dundee United de la Primera División. A partir de ahí, todo fue en ascenso.
Nombrado el Juvenil del Año en la Scottish Premiership, solamente duró un año en el Dundee para dar el salto a Inglaterra con el Hull City, con quienes jugó del 2014 al 2017, año en que uno de los gigantes de Europa tocó a su puerta: el Liverpool.
De no tener dinero para llevar la vida que quería hacía unos años, ahora Robertson enfrentaba a futbolistas como Alexis Sánchez, Raheem Sterling y Eden Hazard los fines de semana en una de las mejores ligas del planeta.
