-Sequía en la zona mantiene en jaque a autoridades
Por Mario Herrera Rocha
Como preocupante puede considerarse el estado que actualmente guarda el río Tancochín, como consecuencia de la escasez de lluvias en la región de la Sierra de Otontepec, lo que mantiene en jaque a autoridades municipales y de la Comisión del Agua del Estado de Veracruz (CAEV).
El titular de dicha dependencia, Héctor Flores Lara, indicó que la situación obliga a distribuir el vital líquido en carros-tanque a los sectores con mayor altura o más alejados del cárcamo de bombeo, ubicado a la altura del paraje conocido como “El Seis”.
Dentro de los más afectados se encuentran El Trébol, 5 de Mayo y Rancho Nuevo.
Lo anterior debido a que el nivel del vaso de captación es ínfimo y el preciado elemento no es suficiente para ser enviado por la red de tuberías al total de las más de 8 mil 500 tomas ubicadas a lo largo y ancho de la cabecera, comunidades aledañas y colonias conurbadas del vecino municipio de Chinampa de Gorostiza.
La falta de una presa que durante la temporada de lluvias logre captar suficiente agua para toda la población sigue siendo un anhelo no sólo para los habitantes de Naranjos-Amatlán, sino también para municipios vecinos como Tancoco, Chinampa de Gorostiza, Tamalín, Tantima, Citlaltépec, Chontla e Ixcatepec.
Sin embargo, a pesar de que se ha hablado mucho del tema, hasta el momento no existe un viso de solución real a dicha problemática, lo que además de afectar la vida cotidiana de estas localidades inhibe su desarrollo económico al impedir que se fortalezcan actividades como agricultura, ganadería, industria y turismo, entre otras.
