-Se quejan de comerciantes foráneos, más no contribuyen al erario municipal
Por Mario Herrera Rocha
Las condiciones en que se encuentra el denominado Mercado de Naranjos (ya que los propios locatarios aseguran que no es “municipal”) dejan mucho qué desear el piso es antihigiénico, carece de servicios sanitarios públicos, la mayoría de los puestos no cuentan con medidas de seguridad y sus pasillos están invadidos de mercancía.
Los posesionarios no pagan contribución alguna al Ayuntamiento por el uso de los locales, ya que no se sujetan a la Ley de Ingresos ni al Código Hacendario porque aseguran ser dueños y no arrendatarios, sin embargo tampoco pagan el impuesto predial debido a que no cuentan con escrituras.
Sin embargo, son estos los primeros en poner el grito en el cielo cuando llegan personas de otros lugares a vender sus productos mediante exhibiciones como la que actualmente se encuentra en el Auditorio Municipal, reclamando a las autoridades la falta de apoyo e incluso poniendo en duda el destino de los ingresos que los expositores generan.
De acuerdo al padrón de la Dirección de Comercio de la comuna, a cargo de Luis Enrique del Ángel Santander, son 68 los locatarios del Mercado Naranjos, sin embargo -como algunos de ellos manifestaron a este medio- en lugar de mantenerse unidos deben librar pugnas internas por la existencia de al menos dos grupos antagónicos.
Por lo anterior -afirmaron- les es difícil ponerse de acuerdo y han dejado ir oportunidades de progreso, pues al menos en la presente administración el Alcalde Marciano Salazar les ofreció colocar “vitro piso” y construirles sanitarios a cambio de que contribuyan al erario municipal, oportunidades que desdeñaron.
