-Familias de la región acuden a disfrutar de los sitios de recreo ante intenso calor
Por Mario Herrera Rocha
Obligados por las altas temperaturas que se registran en la entidad, gran número de familias se dirige todos los días a los distintos parajes que ofrecen los ríos y arroyos, con el fin de mitigar de alguna manera el calor, además de disfrutar agradables momentos de solaz y esparcimiento, en medio de la naturaleza y prácticamente alejados de la civilización.
La Sierra de Otontepec cuenta con numerosos afluentes que son dignos escenarios cinematográficos y que reciben principalmente a visitantes de la misma zona o personas radicadas en otras latitudes del país, pero originarias de esta zona que no pierden la costumbre de visitar su terruño.
En municipios como Tancoco, Tantima, Naranjos y Chontla, es común ver a decenas de personas refrescándose en los cristalinos cauces de los afluentes, principalmente los fines de semana, aprovechando que niños y jóvenes no acuden a las escuelas y el descanso laboral del que gozan algunos adultos.
Dos de los sitios más buscados son El Pachatl (caída de agua, en náhuatl) y La Laja, sobre el río Tancochín, en Tancoco, ambos con nutridos cauces derivados de las lluvias que se registraron hace unas semanas, lo que les convierte en sitios ideales para ser visitados.
Otros prefieren acudir a las playas de la laguna de Tamiahua, como es el caso de las ubicadas en inmediaciones de La Reforma (Tamiahua), Saladero y San Gerónimo (Tamalín), Higueros (Tantima) o Aguas Claras (Ozuluama), donde se encuentran con las tranquilas aguas que invitan a la relajación.
