29 de Marzo de 2024

Tiemblan ganaderos por factura electrónica

-Pequeños ganaderos y productores pecuarios carecen de tecnología para realizarla

Por Sacnité Meraz Osorio

A partir de julio del 2017 el Servicio de Administración Tributaria ha impulsado el rediseño de procesos para propiciar una interacción más oportuna, automatizada y transparente de los contribuyentes con la autoridad tributaria como es uso de la facturación electrónica en todos los sectores económicos.

Las adecuaciones a la factura electrónica suponen grandes beneficios en materia de contabilidad y rendición de cuentas, pues permitirán eliminar en los próximos años declaraciones informativas, ofrecer declaraciones mensuales prellenadas de IVA, ISR y IEPS, así como reducir los requerimientos en materia de contabilidad electrónica.

Sin embargo el sector primario constituido por pequeños productores ganaderos y agricultores, manifiestan que esta nueva disposición es difícil se aplicar para quienes no cuentan con los recursos o equipos para emitir dicho comprobante fiscal.

Tal es el caso de productores ganaderos que habitan en la zona de playa, donde el servicio de energía eléctrica limita la posibilidad de emitir una factura de este tipo al momento de la compra venta.

El SAT había anunciado recientemente la ampliación del periodo de convivencia opcional de la nueva factura hasta el 31 de diciembre de 2017, por lo que tendrán un mes más para la aplicación de las facturas electrónicas pero aun así es un tema que causa temor entre los productores por la dificultad que representa en el manejo de los equipos de cómputo.

Aunque las asociaciones ganaderas coadyuvan a sus miembros desde el 2016 para expedir este tipo de documentos e ir integrándose a este proceso fiscal lo mismo que otros sectores comerciales no se ha logrado.

Ganaderos señalan que no todos los del gremio pertenecen  a una agrupación registrada debido a los múltiples requisitos que se requieren para facturar como son el Unidad de Producción Pecuaria (UPP)  y el areteo, sin los cuales no se puede vender un animal y que tienen que actualizarse cada dos años y suponen un gasto complicado para los pequeños productores, especialmente por el bajo precio del ganado en el mercado, por lo que es preocupante la implementación de la factura electrónica en este sector.