DE LA REDACCIÓN
Al mediodía de este sábado arribó a Martínez de la Torre el Gobernador del Estado de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, en donde inauguró de forma oficial el boulevard Luis Donaldo Colosio, entrada principal a ese municipio y que sirve de acceso a las colonias Maloapan, Santa Ana, Aztlan, Mirador, México, Maravillas, Lomas del Mirador, Veracruz, Del Bosque y Yucatán.
En esta vía transitan más de 50 mil vehículos, además de que representa un cambio de imagen, hecho histórico para el municipio, puesto que cuenta con un ancho de 11 metros, cuatro carriles, alcantarillas, coladeras, guarniciones y banquetas, camellón central, jardinería y señalización vial, ciclopista, iluminación, así como cableado de Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Teléfonos de México (Telmex) subterráneo.
La Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP) estuvo a cargo de la construcción de las tres etapas del boulevard Luis Donaldo Colosio, que consta de 1.2 kilómetros de longitud y que será de gran beneficio para miles de veracruzanos de esta región dedicada a la producción agrícola.
El mandatario, en compañía del alcalde Rolando Olivares Ahumada, hizo el corte del listón inaugural de esta obra de concreto hidráulico, realizada con recursos federales y estatales.
El boulevard se realizó dentro del Programa de Modernización de Caminos Rurales y Carreteras Alimentadoras de la SIOP con Fondo COFECA 2015, Convenio de Coordinación con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), de 24.5 millones de pesos.
En este evento, se recalcó la importancia del trabajo conjunto entre los tres niveles de gobierno para concretar acciones que coadyuven a mejorar los niveles de vida de los veracruzanos. Este es un proyecto integral, que moderniza al municipio con recursos del Presupuesto de Egresos de la Federación.
Ante cientos de familias, Duarte de Ochoa señaló que la infraestructura puesta en funcionamiento transformará a Martínez de la Torre en un municipio competitivo y próspero, atractivo para hacer negocios, para invertir y, por supuesto, para vivir.