Círculos de corrupción
Por Julio Cesar Vega Olivares
Como un balde de agua fría le cayó al PRI el nuevo destape del caso ODEBRECHT en Brasil, al cual en México le habían echado más tierra que al socavón, intentando tapar la corrupción con un dedo, pero claro con el dedo de la mano que mece el poder en México, aunque desafortunadamente porque los partidos nada tienen que ver, sin embargo las acciones de personajes ligados a un partido recaen en ellos. Esto sucede cuando los priistas todavía estaban festejado su Vigésimo Segunda Asamblea y el discurso triunfalista aun resonaba.
Esto como consecuencia de que se revelan las declaraciones de funcionarios de alto rango de la empresa Odebrecht ante autoridades judiciales brasileñas y derivado de la investigación periodística de la organización Quinto Elemento Lab, organización sin fines de lucro, en la trama de sobornos que pagó la constructora brasileña en 10 países de América Latina.
Con esto apreciamos algo más, el piso disparejo, para los del primer circulo del poder, y los de afuerita, a Rafa Márquez y a Julión Álvarez, con un simple señalamiento y sin chance de defenderse, Hacienda les congela las cuentas bancarias.
Y en este caso el de Emilio Lozoya, ex director de Pemex con declaraciones, y señalamientos directos y con supuestas pruebas que acreditan que le dieron 10.5 millones de dólares, como 200 millones de pesos, y que las aportaciones comenzaron cuando Emilio Lozoya era miembro de la campaña de Enrique Peña Nieto en el año 2012, que en ese entonces le dieron 4 millones de dólares y ya siendo director de Pemex el resto, por un contratito de 115 millones de dólares, aunque esto parece como la puntita del iceberg y puede ser que no sea el único contratito en esas condiciones, pero parece que nadie en la Procuraduría mueve un dedo, cuando debería revisarse más el asunto, incluso a funcionarios actuales preventivamente.
Desafortunadamente lo mismo de siempre, los casos de corrupción no los detecta la Procuraduría mexicana y se apercibe de ellos porque las autoridades en otros países ponen de manifiesto la corrupción de mexicanos.
Emilio Lozoya por su parte dice que es inocente, que la información carece de pruebas documentales, que es falsa dolosa e inexistente; de principio a fin y los calificó de chismes sin fundamento, bueno existe presunción de inocencia.
Los ex ejecutivos de Odebrecht bajo juramento vinculan a Emilio Lozoya, citan, fechas, nombres, cantidades, y cuentas bancarias de origen y destino de las cuales se hicieron las transferencias de dinero para estos actos de soborno.
El escándalo en Pemex sube de tono, sobre todo ante la reticencia de las autoridades para actuar, y el sistema anticorrupción pues aun en la incubadora aquí es donde se pone a prueba el sistema y si de verdad van en serio o sigue siendo un simple acto de simulación.
Emilio Lozoya revira y amenaza con demandar a quien publicó esta información, pero mejor debería aclarar, declarar y aportar pruebas de su inocencia, dejarla bien probada, lo demás son fanfarronadas.
Como lo señalo el presidente Enrique Peña Nieto en la 22 asamblea del PRI, “lo dije en marzo y lo reitero quienes han traicionado la confianza de la gente y del partido deberán enfrentar las consecuencias de sus actos”.
Son declaraciones alentadoras, del Señor Presidente ojalá se cumplan.
