23 de Abril de 2024

Por Nancy Jácome

Después de tener que reprogramar en dos ocasiones este viernes en  conocido hotel del puerto se llevará a cabo la “Noche Bohemia” por la Asociación de Arte y Cultura que tiene por objetivo recaudar fondos para continuar difundiendo actividades de esta índole en el puerto de los bellos atardeceres.

La cita es a las siete de la noche y  estará amenizada por artistas locales que han puesto su granito de arena para apoyar a que el arte continúe llegando a todos.

Por otro lado ayer se celebró el día de la raza denominado así al día en que se conmemora el descubrimiento de América por Cristóbal Colón en 1492, por hoy muchos mexicanos que tratan de recordar las raíces de México señalan que este no debería ser un día que se conmemore, pues es la fecha en que los pueblos indígenas comenzaron a ser oprimidos por los invasores extranjeros.

Pero actualmente la mayor parte de los habitantes del país es el resultado de la mezcla entre estas razas y los pueblos indígenas por los que tanto nos indignamos en el pasado continúan siendo oprimidos en nuestros tiempos.

Así que ayer que fue el día de la raza, fue el momento de honrar a la cultura que se perdió y recordemos porque llegó a este punto, también recordemos que los pueblos indígenas continúan vigentes, que las lenguas que se hablaron aún se hablan, que sus cantos y sus bailes aún perduran.

Fue un día para no regatearle los vendedores y productores indígenas  al contrario siempre hay que aprovechar a convivir con ellos para que te platiquen como son sus tradiciones, déjalos enseñarte la lengua de esta tierra, que te muestren a sus dioses y posteriormente no te olvides de que ellos también son mexicanos y tienen derecho a la escuela, a la salud, al trabajo y a que su lengua sea impartida en las escuelas.  

Fue un día también para que regresaras a conocer los orígenes de este continente y para que leas el Popol Vuh, si eres nacido en este puerto debes leer los Lienzos de Tuxpan, que hablan de la región huasteca.

Otro libro muy corto y muy interesante es el de  Alfredo López Austin “El conejo en la Cara de la Luna” en el que  reúne varios ensayos sobre la mitología de la tradición mesoamericana.

El primero de ellos habla sobre el diluvio y a través de una simple plática lo describe a través de la Epopeya de Gilgamesh, los textos bíblicos, los textos coránicos, el Chilam  Balam de Chumayel  entre otros. Porque de alguna forma este fragmento religioso se mezcla en varias culturas y en Mesoamérica puede que se mezcle a parir de la llegada de los españoles que en su afán de eliminar la adoración a otros dioses comenzaron a mezclar las historias.

En el segundo tema habla de “El conejo en la Cara de la Luna” y hace referencia al templo japonés de Yota donde aparece la liebre agazapada en la esfera de la luna, mientras en Mesoamérica la luna tiene en su cara la marca de un conejo.

El libro es de 172 páginas y va engarzando cada una de las leyendas que nos ha contado el mundo con las de Mesoamérica de tal forma que nos lleva a conocer un poco más de las historias que abundan en nuestra tierras y de las que poco conocemos.

Nos vemos en la próxima columna.