- Los episodios de ansiedad son cada día más comunes entre miles de personas en todo el mundo, emplea estas herramientas para combatirlos
Agencias
México
Todos podemos pasar por episodios de ansiedad en algún momento de la vida. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud, alrededor del 4 por ciento de los habitantes del planeta padece ansiedad de forma crónica.
Los eventos sociales, como fiestas o convivios, son un ambiente propicio para la aparición de este tipo de problemas mentales, los cuales pueden tener síntomas como la sudoración, temblor de manos y malestar general.
Aunque no existe un fármaco que elimine completamente la ansiedad, sí existen algunas técnicas y prácticas que, realizadas de forma constante, pueden ayudarte a manejar de mejor forma este tipo de episodios.
La respiración es clave para tranquilizarte y escapar de los episodios de ansiedad, reconectándote con la conciencia del momento y permitiendo que sigas con tu vida de forma normal. Estos son algunos ejercicios que te ayudan a ello.
¿Cuáles ejercicios de respiración combaten la ansiedad?
La tensión y la ansiedad están ligadas con mecanismos de supervivencia en los seres vivos. Sin embargo, la psique humana trabaja de una forma distinta a la de otros animales, por lo que a veces es bueno “apagarlas” un poco.
Uno de los ejercicios más recomendados para tranquilizarte es el llamado imitación del mar. Todo lo que necesitas es respirar lentamente por la boca, exhalando con un ligero sonido de “aaah”. Los expertos señalan que repetir este ejercicio unas 10 veces te podrá beneficiar.
Otro es el llamado “4,7,8”, que consiste en inhalar durante cuatro segundos aire por la boca, retenerlo dentro de tu organismo por siete segundos para, acto seguido, expulsarlo con mucha calma por la boca por ocho segundos. Repetirlo unas cinco veces te permitirá sentirte más relajado.
Por último, si lo que sientes es algo de coraje, puedes serenarte jalando aire frío por la boca haciendo un círculo con tus labios. Luego, ciérralos y pega tu lengua con el paladar y mantén el aire por tres segundos, antes de expulsarlo lentamente por la nariz. Con cada ejercicio que hagas sentirás cómo, poco a poco, el enojo se va desvaneciendo.
Información de El Heraldo de México