El ajo es uno de los alimentos más saludables y con grandes propiedades nutricionales que le confieren diversos beneficios al ser humano. Se sabe que este alimento cuentan con más de dos mil componentes activos, entre los que destacan diversos aceites esenciales, quercetina, fructosanos, compuestos de azufre, una gran variedad de vitaminas y minerales y antioxidantes, por lo que también es explotado con fines medicinales y para remedios naturales.
Ahora bien, el ajo se caracteriza por un fuerte aroma, que proviene de la aliína liasa o alinasa, que al entrar en contacto con el oxígeno forma la alicina, una sustancia que no sólo desprende ese fuerte olor del ajo, sino que también es donde se contienen la mayor cantidad de propiedades terapeúticas, razón por la que se aconseja ser cortado en laminitas o machacado para obtener todos los beneficios de este compuesto.
Aunque hasta ahora no hay una evidencia científica que demuestre que el mejor momento para consumir el ajo es en las mañanas o antes de ir a dormir, algunos aseguran que consumir ajo en ayunas o por las noches es lo más óptimo. Lo que sí se sabe es que su consumo regular puede ayudar a tu sistema inmunológico y beneficiarte de otras maneras.
8- Previene enfermedades
Está científicamente comprobado que su consumo previene patologías y enfermedades respiratorias. Disminuye el riesgo de contraer cáncer de pulmón, próstata, estómago y colon, gracias a su alto contenido en antioxidantes como la lisina y la quercetina cuando se consume crudo. Incluso es muy efectivo contra los tumores cerebrales.
Un estudio que se llevó a cabo en la universidad de Medicina de Carolina del Sur, Estados Unidos, dio a conocer que sus compuestos orgánicos, como el azufre, han sido efectivos en la destrucción de las células de un tipo de cáncer cerebral mortal. Además, puede ayudar a prevenir el riesgo de tener ACV, ya que disminuye la presión sanguínea y favorece la circulación y el transporte de oxígeno.
7- Potente antibiótico
El sulfuro de dialilo es un compuesto del ajo 100 veces más eficaz que algunos antibióticos populares para luchar contra bacterias que producen infecciones intestinales. Además, su consumo regular ayuda a reducir daños hepáticos.
El consumo de alcohol por un periodo prolongado puede producir que tu hígado no esté en óptimas condiciones y comer ajo puede colaborar a sanarlo dado que el sulfuro que contiene puede servir como protector.
6- Control de colesterol e hipertensión
Una investigación de la Universidad de Ankara (Turquía) dispuso a personas a consumir diariamente un suplemento con extracto de ajo durante cuatro meses y encontraron que bajaba los niveles de colesterol y de presión arterial. El ajo fortalece el antioxidante de la sangre, una de las causas de reducción en la presión.
5- El ajo protege el corazón
Se descubrió que un compuesto del aceite de ajo ayuda a proteger el corazón luego de un ataque, reduciendo notablemente los posibles daños cardíacos. Algunas de las substancias presentes en el ajo inhabilitan la agregación de las plaquetas por lo que se ha propuesto su uso en el control de enfermedades cardíacas.
4- Combate las verrugas (vía tópica)
La aplicación de trozos de ajo fresco sobre una verruga es un buen remedio, ya que si se lo aplica diariamente puede lograr su desaparición en menos de una semana. Hay quienes usan la mezcla del ajo triturado con limón, para tratar esta protuberancia de la piel. Además, el consumo del ajo, al tratar con el sistema inmunológico, previene la aparición de estas enfermedades de la piel.
3- Mejora la circulación de la sangre
El ajo contiene vitamina B, el compuesto principal para reducir los niveles de homocisteína. Esta sustancia endurece los vasos sanguíneos y puede traer múltiples problemas como trombosis o enfermedades coronarias. El consumo del ajo en ayunas puede colaborar con la lucha contra estas posibles complicaciones.
2- Posee un alto valor nutricional
El ajo posee un alto valor nutritivo. Cada 28 gramos contienen 42 calorías y vitaminas C, B6 y manganeso. Consumir un diente de ajo en ayunas puede reducir el colesterol malo y proteger nuestro corazón. Además, sirve como remedio depurativo, antiséptico y antibacteriano.
1- Ayuda con los resfríos, gripes y afecciones respiratorias
Como es fuente de minerales como el yodo, fósforo, potasio y vitaminas, tiene acción antiviral y ayuda a reforzar la acción de nuestro cuerpo contra las infecciones. Incluso, el ajo es expectorante por lo que resulta muy útil en afecciones respiratorias como asma, bronquitis aguda o crónica. Sus propiedades antibióticas ayudan a la eliminación de bacterias y otros microorganismos y contribuye a que las personas se recuperen de afecciones respiratorias ya contraídas.Y para sumar, estimula la eliminación de las toxinas asociadas al tabaquismo, por lo que genera que las personas que fuman o fumaron puedan eliminar los restos de manera natural.
