22 de Noviembre de 2024

Negocio redondo de los caza tesoros subacuáticos

Oro, plata, balas, cañones, cerámica y joyas yacen en el fondo marino de la costa Este de Florida, un festín al que las compañías exploradoras tienen permiso de acceder

AGENCIAS

Florida

El reciente hallazgo de 60 monedas de oro procedentes de un galeón español del siglo XVIII, recuperadas por "caza tesoros" en el fondo marino de la costa Este de Florida, pone de nuevo el foco en el saqueo que sufren los pecios de bandera española.

Para nadie es un secreto que la costa Este de Estados Unidos, principalmente la de Florida, es una zona que acoge restos de viejos galeones españoles, de cientos de pecios, probablemente, sobre los que tienen puestos sus ojos, recursos y tecnología. las compañías "caza tesoros".

 

Son incontables los naufragios de galeones, fragatas y cargueros españoles en las cálidas aguas de Florida y a lo largo de las rutas comerciales que dieron la vuelta al mundo. A esta búsqueda en las costas de Florida de los míticos tesoros y yacimientos subacuáticos de bandera española se apunta hoy cualquier vecino que cuente con un detector de metales.

Es el caso de la familia Schmitt, residente en Sanford, que recuperó del fondo marino, utilizando un detector de metales, 60 monedas de oro valoradas en más de un millón de dólares, procedentes de un galeón español que naufragó hace 300 años.

Eric Schmitt y su familia recuperó a 4.5 metros de profundidad en la costa de Fort Pierce, en el condado de St. Lucie (Sureste de Florida), monedas de oro que viajaban en alguno de los once galeones de la Flota Española que naufragaron el 31 de julio de 1715 en esa zona a causa de un huracán. Fueron felicitados por la compañía 1715 Fleet-Queens Jewels, poseedora de los derechos sobre el lugar del naufragio.

Esta compañía fundada en 2010 por William y Brent Brisben es una de las que opera en aguas de Florida, un Estado que atesora en cada yacimiento subacuático una cápsula del tiempo cuyo valor histórico y cultural permanece todavía sellado en un gran número de casos.

"Aquí está tu oportunidad de poseer una pieza rara y valiosa de la historia del tesoro de la flota 1715. Tenemos escudos de oro y reales de plata. También ofrecemos monedas montadas como joyas, así como balas de mosquete, cañón y fragmentos de cerámica", reza el anuncio de venta en una de las páginas de la compañía. Más parece una comercialización de souvenirs.

 

Piratas modernos o románticos en busca de aventuras, lo cierto es que la opinión pública y las autoridades estadounidenses empiezan a ver la actividad de las empresas "caza tesoros" más como un acción destructora de los yacimientos y la cultura.