Tras su mordisco a Chiellini, la FIFA decidió sancionar al jugador
Se perderá lo que resta del Mundial
AGENCIAS
Brasil
Luis Suárez fue suspendido por la FIFA con nueve partidos internacionales, por lo que se perderá el resto del Mundial. Además, el delantero charrúa tiene prohibido participar en cualquier actividad vinculada al fútbol durante cuatro meses.
El castigo es a raíz de la mordida que Suárez propinó a Giorgio Chiellini, en el partido contra Italia, que clasificó a Uruguay a los Octavos de Final.
"Se prohíbe asimismo a Luis Suárez entrar en los recintos de todos los estadios durante el periodo de duración de la prohibición. El jugador tampoco podrá entrar en los recintos del estadio en el que la Selección uruguaya dispute un encuentro mientras esté cumpliendo con los nueve partidos de suspensión", explica el comunicado de FIFA.
Suárez también tendrá que pagar una multa económica de casi 112 mil dólares, en francos suizos, al organismo internacional.
Pese a la defensa de la delegación uruguaya, que presentó un video al Comité de la FIFA, el cual incluye la jugada de la polémica, agresiones e insultos contra Suárez por parte de futbolistas italianos, la sanción se dio a conocer este jueves al jugador y a la Asociación Uruguaya de Futbol.
"No se puede tolerar este tipo de comportamiento en un terreno de juego, especialmente durante la Copa Mundial de la FIFA, cuando millones de personas tienen la vista puesta en los jugadores. La Comisión Disciplinaria ha tenido en cuenta todos los elementos del caso y el grado de culpabilidad de Luis Suárez de acuerdo con lo estipulado en el Código Disciplinario. La decisión ha entrado en vigor en el momento en el que se ha comunicado", expresó Claudio Sulser, presidente de la Comisión Disciplinaria de la FIFA.
No es la primera vez que Suárez cae en este tipo de comportamientos. En 2013, el delantero charrúa fue suspendido diez partidos de la Liga inglesa por morder el brazo del defensa serbio del Chelsea, Branislav Ivanovic, y además tuvo que acudir a terapia psicológica.
Como jugador del Ajax, en un duelo ante el PSV, Suárez atacó a Otman Bakkal, costándole hasta nueve partidos de suspensión.