El título del Apertura 2019 redondeó un gran semestre para el Monterrey, pues esta corona se sumó al tercer lugar del Mundial de Clubes alcanzado en Qatar, y uno de los principales responsables de este súbito éxito es el entrenador Antonio Mohamed, quien asumió las riendas del equipo cuando este atravesaba un turbio presente y los llevó a la cima en breve tiempo. Y fue precisamente Mohamed quien disfrutó en mayor medida el campeonato obtenido ante el América, ya que, más allá de lo deportivo, este logro le permitió cumplir la promesa que le hizo a su fallecido hijo de hacer campeón al Monterrey.
Las lágrimas que derramó el Turco tras el penalti de Leonel Vangioni fueron producto de sus sentimientos más profundos y una muestra genuina de satisfacción al poder materializar la promesa hecha a su hijo Faryd, quien falleció en Alemania en 2006 en un accidente automovilístico.
"Mi hijo nació en México, era fiel a la mascota del equipo y todas las fotos que tengo de él son con la mascota saliendo con el Monterrey. Tengo recuerdos muy grandes de lo que es Monterrey", declaró en su momento Mohamed previo a su primera incursión como técnico en México.
Y es que el entrenador ya se había quedado a la orilla con los Rayados en un par de ocasiones cuando ante Pachuca, en el Clausura 2016, y frente a Tigres, en el Apertura 2017, el Monterrey vio dramáticamente cómo el campeonato se le escapaba de las manos.
En dichos encuentros, al igual que en la mayoría de sus compromisos de temporada regular, el técnico siempre portó un rosario que colocaba en un asiento de la banca, el cual, en su momento, explicó que se trataba de un ritual para tener siempre presente a su hijo. "Voy a seguir llevando el rosario en el banquillo, mi hijo me acompaña siempre", expuso en una entrevista el estratega.
Estos duros reveses sumaron a que Mohamed abandonara en su momento el banquillo de los Rayados, pero se comprometió a que regresaría para hacerlo campeón, y su 'improvisado' y exitoso regreso reafirma su compromiso con el club y su calidad, lo que ya lo inscribe como uno de los mejores entrenadores de la Pandilla de la época reciente.
