Lamentó que personas que gozan de todas sus facultades físicas arbitrariamente ocupen sitios destinados a quienes por necesidad utilizan silla de ruedas, bastones, andaderas o muletas, así como embarazadas.
Debido a que, pese al esfuerzo institucional, hay personas que insisten en no apoyar ni respetar dichos espacios–añadió el legislador–, entonces hay que sancionarlas, incluso exhibirlas a través de fotos y videos, promover la aplicación de multas o, cuando se presenten a pagar la tenencia vehicular o tramitar la licencia de conducir, advertirles que incurrieron en una falta administrativa al invadir estos espacios.
Por ejemplo, en el inicio de la campaña para colocar calcomanías en vehículos y distribuir trípticos informativos, frente a un centro comercial se encontraba una señora en silla de ruedas, en pleno sol y a un costado de la banqueta, esperando que pasaran por ella, debido a que quien la acompañó tuvo que dejar su vehículo varias cuadras adelante porque los cajones para personas discapacitadas estaban ocupados.
Esta lamentable situación se registra prácticamente en todos los municipios de la Entidad y, al parecer, la única manera de hacer conciencia, es a través del bolsillo.