- Exigen atención inmediata a los daños ocasionados al sector turístico y pesquero, por la presencia de manchas de chapopote
Agencias
Xalapa
Las playas de Pueblo Viejo, en la zona norte de la entidad veracruzana, han registrado la presencia de manchas de chapopote de hasta un metro de diámetro y a pesar de que la llegada de este hidrocarburo se registró a inicios de julio, hasta ahora Petróleos Mexicanos (Pemex) no ha acudido a la zona, ignorando completamente el problema para no darle solución.
Ana Gómez, emprendedora y habitante del ejido El Chachalaco en el municipio de Pueblo Viejo, al norte de Veracruz, señala que las afectaciones son graves porque la contaminación por hidrocarburo afecta las aguas de la zona, pero también la actividad pesquera y turística.
“Estamos viendo afectación por los residuos de chapopote en la playa a partir de principios de julio. En los límites de Veracruz y Tampico, a un lado del puerto de Tampico. Primero vimos piedras y bolitas de chapopote, pero con el paso de la semana se empezaron a presentar montículos más grandes y abarcar la extensión de la playa que son 126 metros entre escollera y escollera”, dijo.
Aseguró que los montículos abarcan una extensión de un metro y están en todo el largo de las escolleras, en la playa e incluso se ha reportado chapopote líquido en el mar. Con ello se ha generado afectaciones a la pesca, aunque Ana comenta que los pescadores no han querido denunciar los daños por temor a las represalias de las autoridades.
El turismo también se ha visto afectado porque quienes llegan a la zona no pueden meterse a la playa ante la presencia de este aceite que además es nocivo para la salud, pues incluso hay chapopote mezclado con sargazo. Ante ello, Ana demandó que las autoridades se hagan responsables y realicen labores de limpieza porque el daño es extenso.
“No sabemos qué hacer para poder limpiar y sanear la playa. Nosotros estamos dispuestos a ser capacitados para poder hacer la limpieza”.
Este miércoles, defensores del territorio, comunidades y organizaciones de la sociedad civil denunciaron las afectaciones producto de los derrames de petróleo acontecidos en el Golfo de México, como el del pasado 6 de julio.
“Los impactos identificados por las comunidades de Campeche, Veracruz y Tamaulipas no son aislados, sino que son recurrentes debido a una operación petrolera que normaliza los derrames que ocasionan daños irreversibles en los ecosistemas, las especies nativas de la zona, la salud de las personas, la economía local y hasta en aspectos culturales que determinan la identidad de los habitantes de las comunidades afectadas”, señalaron en su comunicación oficial.
Afirman que Pemex no ha respondido con claridad respecto a los impactos que los desastres asociados a su operación han provocado en la zona costera y en comunidades cercanas y estas se han convertido de facto en zonas de sacrificio que ponen en constante riesgo a los pobladores y ecosistemas.
Lo anterior por los daños directos a fauna marina, particularmente tortugas cuya temporada de desove se aproxima en playas que se encuentran contaminadas con hidrocarburos.
Además, hay afectaciones a actividades económicas como el turismo en los estados de Veracruz y Tamaulipas, donde en semanas previas el arribo de crudo sigue siendo apreciable en las playas en la forma de montículos de hasta un metro de diámetro. A esto se suma la contaminación de pescado recolectado en las costas de Tamaulipas, y que acuerdo con testimonios de pescadores presenta olor a crudo.
“El desinterés de las autoridades, como la ASEA, Profepa y Semarnat colocan como prioridad al mercado de hidrocarburos y sus políticas por sobre la vida, la salud y el valor ecosistémico de los bienes de la naturaleza”. Ante ello, demandaron acciones inmediatas de valoración y reparación de los daños generados, tomando en cuenta las afectaciones a la salud de las personas.