* Cada año aumenta la demanda
REDACCIÓN
NARANJOS
Don Catarino Iglesias Torres, quien fuera dos veces presidente municipal, fue uno de los continuadores de la tradición que trajeron los chinos de su país, de elaborar bísquets y otras piezas de pan, a las que él agregó las roscas de reyes en enero.
Si hijo, Catarino Iglesias Miguel, "El Cuate", desde hace más de 20 años cultiva el oficio en un pasillo, donde vende por las mañanas y por las tardes deliciosos bísquets con mantequilla y exquisito café, al igual que las roscas de reyes, de levadura y de pastel, a inicios de este mes.
Su negocio es una empresa netamente familiar; con él trabaja su esposa e hijos, su hermano y su cuñada al igual que sus sobrinos, además de otros panaderos: unos baten los ingredientes, otros amasan, algunos hornean y unos más decoran las roscas.
Desde el día 4, "Catache" Iglesias comenzó a confeccionar las roscas y seguirá vendiéndolas hasta que niños y jóvenes regresen a las aulas, pues el primer día de clases partirán la rosca con sus maestros y quienes encuentren una figura representativa del Niño Dios tendrán que invitar los tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
Los precios fluctúan desde los 150 hasta los 350 pesos, dependiendo del tamaño y, contrariamente a lo que podría pensarse, la demanda es cada vez mayor, tal como lo comenta Iglesias Miguel, quien afirma sentirse orgulloso de conservar su pequeño café y recibir la visita de gente que viene de vacaciones y en cuyo itinerario no puede faltar su visita a "El Cuate".
