Ayuntamientos se declaran incompetentes para reparar las vialidades que comunican a sus respectivas poblaciones
MARIO HERRERA ROCHA
Naranjos
En deplorable estado se encuentra la mayoría de las vialidades que comunican a las diferentes comunidades rurales de la zona entre sí y con sus respectivas cabeceras, por lo que urge la intervención de los diferentes niveles de Gobierno para solucionar dicha problemática, que afecta a miles de personas que radican en esos lugares.
Sin embargo, los Alcaldes de la región de la Sierra de Otontepec y la Laguna de Tamiahua han manifestado en las reuniones que mes tras mes llevan a cabo la falta de capacidad económica de los Ayuntamientos, debido a que los recursos que reciben son limitados y las necesidades de sus representados son muchas.
Martín Cristóbal Cruz, de Tamiahua; Marciano Salazar Hernández, de Naranjos-Amatlán, y Jesús Zaleta Redondo de Tancoco, coinciden en dicho punto, pues sus respectivos territorios se encuentran entrelazados y en ciertos casos es necesario cruzar límites para dirigirse a alguna localidad de su propio municipio.
En lo que respecta a Naranjos-Amatlán, las poblaciones que por el momento no presentan ese problema son las ubicadas en inmediaciones de la vía federal 180 y la carretera a Tamiahua, al igual que Cervantes, cuyo camino fue recientemente rehabilitado, aunque el resto sí padecen por el deterioro de las vías de comunicación.
Como ejemplos pueden citarse aquellos núcleos poblacionales situados sobre la antigua ruta a Tamiahua como San Benito y Diego González, pertenecientes a Naranjos, junto con La Pimienta y Cerro de Oro de Chinampa e Gorostiza; o bien los ubicados en el camino alterno como Empalizada y Buenos Aires, en territorio de Naranjos, al igual que Totomoxtépec y El Anono, de Tamiahua.
