- "Queremos agua", es el desesperado clamor de los habitantes de la Sierra de Otontepec
REDACCIÓN
NARANJOS
Los días pasan y las lluvias no llegan. Sólo algunas lloviznas se han dejado sentir en la sierra, pero son incipientes para apaciguar el intenso estiaje que se apodera de la región norveracruzana. Mientras tanto, la desesperación se apodera de la gente, cuyo único clamor es: "queremos agua".
Las pipas que los ayuntamientos envían a las comunidades más afectadas no se dan abasto para satisfacer la demanda de la población. La desmedida deforestación de que durante muchos años ha Sido objeto el Otontepec hoy cobra factura. La sobreexplotación de los mantos acuíferos también. Los efectos que se veían venir ya llegaron.
Lo que no llega es la solución a este grave problema, que sería construir una presa sobre el Tancochín, la cual garantizaría el abasto permanente del preciado elemento todos los días del año a localidades de los municipios de Naranjos, Chinampa, Tamalín, Tantima, Citlaltépetl, Chontla e Ixcatepec.
La inversión que se requiere es cuantiosas y los gobiernos municipales por sí mismos no podrían solventar una obra de tales dimensiones, sin embargo ni el gobierno federal ni el estatal parecen estar preocupados por ese tema, pues desde hace varios años se habla de ello pero no existe ningún avance. En tanto, el río se sigue secando y cada vez hay más pobladores y menos agua.
