* Brillante espectáculo ofrecen los palos de rosa durante su floración
REDACCIÓN
TANTIMA
Los ya de por sí atractivos parajes de la Huasteca se engalanan con el colorido de las flores de un árbol muy peculiar, que se encuentra comúnmente a orillas de carreteras y caminos, imprimiendo un toque de belleza a los paisajes que el automovilista y el caminante se encuentran al circular por estos rumbos.
Se trata de el palo de rosa, que gracias a la mágica y sabia naturaleza permite a propios y extraños deleitarse con el panorama, que también se puede admirar en parques, campos y en los patios de algunas casas de éste y los demás municipios de la Sierra de Otontepec, los cuales se tiñen de color rosado cada año en la época primaveral.
Pero no sólo los árboles dejan ver el contraste que produce el rosa con el blanco de las flores,, ya que estás se diseminan por los alrededores, coloreando también el suelo una vez al año y por muy corto tiempo, por lo que vale la pena detenerse a observar el espectáculo antes de que desaparezca.
El palo rosa es el nombre común con el que se conoce a varias especies árboreas o sus maderas, que procedentes de las zonas intertropicales y subtropicales de África y Asia han encontrado una tierra fértil en esta región, de la que se han apoderado y en la que se han vuelto parte de su esencia, como un regalo que cada año Dios hace llegar a sus dominios terrenales.