* Agradecen a naranjenses su hospitalidad y apoyo para reparar unidades volcadas
REDACCIÓN
NARANJOS
Julio y Óscar son dos guatemaltecos que viajaban de Estados Unidos a su país, cuando el segundo de ellos se accidentó, resultando milagrosamente ileso luego de volcar el convoy de dos vehículos que guiaba, sobre la carretera federal 180, en el municipio de Tantima.
Para su fortuna, fueron auxiliados por el delegado local de Cruz Ámbar, Rubén Darío Carrillo Alarcón, quien los apoyó durante su estancia de tres días en la ciudad, para medio reparar las unidades y reanudar su camino hacia el sur.
Antes de partir, los sudamericanos agradecieron ampliamente las atenciones recibidas por Rubén Carrillo y en general por los naranjenses que les brindaron su hospitalidad, calidez y ayuda, al encontrarse en un lugar que no conocían a fondo y sin saber a quién recurrir.
Varios herreros y mecánicos contribuyeron para armar de nuevo el tirón con el que el primer vehículo remolcaba al segundo, adaptar un rin a una de las llantas, instalar un cristal improvisado y echar a andar el auto piloto, que quedó destrozado.
Los guatemaltecos manifestaron que ya antes habían pasado por Naranjos y habían aportado algunas monedas a Carrillo Alarcón cuando realizaba labores de boteo en la carretera, mas nunca se imaginaron que el destino los llevaría a conocerse.
