8 de Octubre de 2024

Élida Uscanga, reina por siempre

-Considera que 25 años después la fiesta evoluciona sin perder su esencia

Por MARIO HERRERA ROCHA

“25 años no es cualquier cosa”, expresa Élida Uscanga Álvarez, al recordar que en 1992 se convirtió en Reina del primer Carnaval de la era actual. “Fue una experiencia maravillosa pero a la vez triste, porque al finalizar mi reinado tuve que entregar sola la corona, ya que el rey, Nacho, mi compañero y amigo, había fallecido”, expresa con nostalgia.

“Pero el Carnaval tenía que seguir, y después de 25 ediciones continúa y ha evolucionado”, comenta Élida Uscanga. “Aquella vez la coronación fue en la calle, con la gente arremolinada alrededor, ya que no había gradas; Nacho y yo desfilamos en la batea de una camioneta adornada con globos y con el sonido de una grabadora”, suspira.

Describe su vestido real como largo, elegante y sin pedrería, a diferencia de lo de hoy. “La tendencia de la moda ha cambiado como todo lo demás; los vestidos son geniales, lo mismo que el vestuario, los bailes, los movimientos de las comparsas y qué no decir de los espectaculares equipos de sonido, con luces y pantallas gigantes, aunque la esencia es la misma, la diversión del pueblo”, destaca.

En el plano personal, a Élida Uscanga ser soberana le abrió muchas puertas, ya que fue invitada a participar en varios eventos y obtuvo títulos que van desde Reina del CETIS 133 y de la primavera hasta Miss Playa en Tuxpan y Señorita MT a nivel Zona Norte. “Tengo una hija de 19 años y un nieto que se emocionan igual que yo cuando les platico estas vivencias que son para toda la vida, pues sigo estando en la mirada de la gente, que me demuestran su afecto y cariño”, externa.

Opina que en las recientes fiestas carnestolendas, por tratarse de la edición número 25, el pueblo esperaba un programa especial con la presencia de quienes han llevado el reinado en todo este tiempo e incluso en épocas anteriores. “Para mí habría sido interesante y le hubiera impreso más fuerza a la coronación”; sin embargo no se hizo alusión alguna a este aniversario de cuarto de siglo”, enfatiza. 

Por último, invita a los naranjenses a preservar la tradición y junto con el Carnaval promover las bellezas naturales de la región, sus costumbres, su gastronomía y su hospitalidad, para que la celebración llegue a sus 50 años y siga perdurando por siempre. “Es gratificante ver bailar a las pequeñitas porque son parte de un semillero”, puntualiza Élida Uscanga Álavarez, quien aún conserva su corona y no en balde, pues es y será Reina por siempre.