-Lo identificó y reclamó su hermana, radicada en Paraíso, Tabasco
Por Mario Herrera Rocha
Por fin, después de una semana de haber fallecido, fue sepultado Mauro Alberto Cano Cano, quien el pasado miércoles 18 murió bajo un árbol junto a la antigua brecha a Cerro Azul, frente al Fraccionamiento Santa Teresa, luego de ser identificado por su hermana, Leticia Cano Cano, quien radica en Paraíso, Tabasco.
A través de su asesor jurídico, Armando Ramírez Castillo, el Ayuntamiento brindó todas las facilidades a la consanguínea del occiso para efectuar los trámites correspondientes en la Oficina del Registro Civil e inhumar los restos de Mauro Alberto en el Panteón Municipal.
A punto estuvo el infortunado indigente de ser sepultado en la fosa común, pues a pesar de contar con familiares en este lugar y en Ciudad Madero, Tamaulipas, nadie reclamaba su cuerpo en el Servicio Médico Forense (Semefo) de Ozuluama.
