-Aguas residuales desembocan en el afluente y éste en la Laguna de Tamiahua
Por Mario Herrera Rocha
No sólo las aguas residuales que descarga Petróleos Mexicanos ni las que brotan de los tubos colapsados en algunos puntos de la ciudad contaminan al río Tancochín, sino la totalidad de los drenajes de la ciudad, pues son vertidas al afluente sin tratamiento alguno.
A decir del geólogo Óscar Tapia Barrera, ex catedrático del Centro de Estudios Tecnológicos Industrial y de Servicios Número 133 y ex funcionario de la dirección municipal de Obras Públicas, toda la contaminación entubada o a cielo abierto finalmente termina en el Tancochín, el cual recorre alrededor de 18 kilómetros antes de desembocar en la Laguna de Tamiahua.
“La solución adecuada a esta grave problemática consiste en eliminar de origen ese gran vertedero que afecta sobremanera al entorno ecológico y al medio ambiente en general, con la construcción de una planta tratadora o de varias plantas por colonia o grupos de estas”, manifiesta Tapia Barrera.
Específicamente en lo que se refiere a Pemex, el profesionista parte de la premisa de que “si las instalaciones de la empresa se ubican en la cabecera municipal, las propias autoridades son las deben darse a la tarea de exigirle que participe en la búsqueda de una solución a dicha problemática”.
“Una planta de tratamiento de aguas residuales es una alternativa, que sería aplicable a toda la red de drenaje sanitario de la zona urbana, ya que todos los desagües desembocan en el río, razón por la cual necesitamos poner una hasta aquí a este gran problema que afecta a los naranjenses”, puntualiza.
