-En la Sierra de Otontepec mientras algunos poblados tienen vías de comunicación de concreto, a otros se accede a lomo de mula
Por Mario Herrera Rocha
Comunidades rurales como El Gallito o San Jerónimo Viejo, que más bien es un caserío, se localizan a alturas superiores a los 500 metros sobre el nivel del mar y carecen de caminos para desplazarse en vehículos automotrices, por lo que sus escasos habitantes se ven en la necesidad de hacerlo a caballo o caminando.
Por el contrario, algunas localidades situadas cerca de las cabeceras, entre los 100 y los 200 metros de altura como La Mesa de Tlanchinol, se han beneficiado con vías de comunicación a base de asfalto o concreto, por lo que el traslado de sus moradores es rápido y seguro.
Algunas otras poblaciones ubicadas entre 300 y 500 metros sobre el nivel del mar han corrido con mejor suerte, como es el caso de San Jerónimo, que cuenta con una carretera de concreto hidráulico de altas especificaciones, con una longitud de 1.6 kilómetros, correspondientes a una primera etapa de su construcción.
Dicha obra fue ejecutada por la anterior administración estatal y tuvo un costo cercano a los 10 millones de pesos, beneficiando a pobladores de varios núcleos urbanos, especialmente a productores agrícolas y ganaderos, al igual que a quienes ingresan para comprar hojas de maíz, leche, quesos y otros productos.
Sobre esa misma arteria se sitúa el Centro de Bachillerato Citlaltépetl y la Casa de la Iglesia, esta última de gran importancia para un destacado sector de la feligresía católica de Naranjos, pues ahí se realizan continuamente retiros y otros eventos, por lo que también la Diócesis de Tuxpan se vio favorecida.
