“Lo que buscamos es que las lenguas indígenas tengan un estatus distinto, que ya no se miren como lenguas de segunda. Me parece que una política lingüística, de facto, tendría que darse a través de la formación de nuestros jóvenes, no sólo en la UVI, sino en el resto de los campus de la Universidad Veracruzana”, apuntó.
Las ideologías en contra de las lenguas indígenas no contribuyen a garantizar una sociedad plural, donde exista un trato igual, pues las diferencias sólo crean desigualdades.
“Tenemos que cambiar nuestra forma de pensar y de ver a los otros, porque supuestamente dice la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 2, que la Nación Mexicana está sustentada en sus pueblos indígenas. En ese sentido ¿cuál es el papel, cuál es la valoración de los pueblos?”, cuestionó.
La lengua es un elemento y un símbolo de identidad y un patrimonio lingüístico de la humanidad; sin embargo, no se le ha dado la importancia necesaria dentro de la sociedad.
Las escuelas bilingües en la entidad veracruzana son escasas, por falta de personal que cuente con las competencias necesarias, situación que no han podido atender las autoridades estatales y federales.
“Varias instancias pueden colaborar; la CDI, el INALI, son de Gobierno Federal, se quedan cortas, tenemos que hacer un mayor trabajo”, agregó.