La primera mujer que ejerce el cargo de Rectora en la Upoli participó en el Foro Internacional “Educación Superior y el Desarrollo Iberoamericano”, convocado por la Universidad Veracruzana en el marco de su Septuagésimo Aniversario y en miras de la XXIV Cumbre Iberoamericana que contará con la presencia de 22 jefes de Estado que se desarrollará en diciembre próximo, cuya sede será la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
La Rectora de la Upoli dijo que un desafío importante para las universidades públicas latinoamericanas es enseñar a la comunidad universitaria a pensar de una manera analítica y crítica.
Otra utopía: Red entre Universidades
Para Zamora Cortés la realidad mexicana de que el mercado laboral favorece a personas con educación básica y que a mayor grado académico mayor tasa de desempleo (según lo divulgó recientemente la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), es similar a la nicaragüense.
“Nuestros estudiantes están egresando de las aulas y no encuentran empleo. La mayor parte de ellos se sumen en el subempleo y obviamente no les permite tener beneficios sociales, entre otras cosas.”
Tal situación tiene que ver con la falta de desarrollo social y de oportunidades que prevalecen en Nicaragua. Aunque allá recientemente han entrado muchas empresas extranjeras, cuya actividad ha generado empleos, no se han cubierto todas las necesidades.
En la actualidad está en proyecto el Gran Canal Interoceánico de Nicaragua, en el que participa inversión china, cuya obra presupone una oportunidad a mediano y largo plazo de emplear a la juventud del país, mencionó la Rectora de la Upoli.
No obstante, aclaró que las oportunidades que generan las empresas extranjeras no son las que sacan a un país de la pobreza, pero ayudan al menos a mantener el estándar mínimo de vida de muchas personas.
Otro punto que la Rectora de la Upoli calificó como importante es el cultivo de valores, de la espiritualidad entre la comunidad universitaria (académicos y estudiantes), que ayudaría a entender las necesidades de otros, a cultivar la paz y la tolerancia necesarias para que un país avance.
Uno más es la participación de las mujeres en la producción científica, cuya incitación es necesaria desde la educación básica, pues a la fecha aunque participan en grupos de investigación, no se les toma en cuenta a la hora de otorgar los créditos.