“Esto es muy curioso (postura de la Iglesia y de los evangélicos), porque el Papa Francisco no tiene exactamente esa posición de las conferencias episcopales mexicana o española, que también es igual; en varias ocasiones ha manifestado que él no es nadie para juzgar”, señaló.
En entrevista previa al seminario La teoría feminista como análisis de las intersecciones de las opresiones, la especialista destacó que las iglesias tienen una tarea muy importante en cuanto a la tolerancia de la diversidad humana.
“Decirle este tipo de cosas a las iglesias puede sonar verdaderamente paradójico; creo que muchas veces han justificado discriminaciones y un tratamiento verdaderamente cruel, considerando las violencias, discriminaciones y desigualdades que durante muchos siglos han vivido las personas homosexuales”, expuso.
Además, Guerra Palmero recalcó que la iniciativa presentada por el diputado local de Movimiento Ciudadano (MC), Cuauhtémoc Pola Estrada, en el Congreso de Veracruz, representa un avance en la lucha contra la discriminación de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales.
“Todos los pasos que se den son importantes y es un tema de derechos civiles, de derechos básicos; no estamos hablando de una cuestión marginal sino una cuestión que afecta de manera importante la vida de muchas personas”.
Además, criticó que algunos sectores se opongan a la iniciativa de Ley de Sociedades de Convivencia cuando se sabe que ésta no permitiría el matrimonio entre dos personas del mismo sexo.
“Mi perspectiva es la de la igualdad. Entonces yo creo que son posiciones (de los católicos y evangélicos) que simplemente legitiman tradiciones que no consideraban la diversidad humana, que niegan el hecho de la diversidad humana y que obligan a varios sectores a vivir invisibles, ocultos, o como se dice, ‘en el clóset”, finalizó.