Yhadira Paredes
Xalapa
La secretaria de Protección Civil, Noemí Guzmán Lagunes, señaló que el personal de su dependencia trabaja en las acciones preventivas para hacer frente a la próxima temporada de lluvias y huracanes de 2014, tomando como experiencia las afectaciones registradas el año pasado con la caída de agua más importante en la historia del estado.
En entrevista, Noemí Guzmán señaló que 2013 se volvió un año muy complejo con la presencia de 19 ondas tropicales, una depresión tropical, dos tormentas y un huracán que originaron el desbordamiento de 239 de los 240 ríos veracruzanos.
“Esta experiencia es muy importante. Hay que recordar a la población que de los 240 ríos se nos desbordaron 239; sólo el Papaloapan se quedó en su margen, todos los demás se salieron”.
Señaló que se debe tener memoria histórica y tomar decisiones para hacer frente a la temporada de este año, pues recordó que derivado del fenómeno hidrológico se generó un fenómeno geológico con el deslizamiento de tierra.
“Tenemos que tener memoria histórica para tomar decisiones de cómo prepararnos para este año 2014. Primeramente, estamos por presentar dentro de unos días un libro, un folleto de la situación de deslizamientos y deslaves de 2013, donde podremos dar no sólo la estadística, sino algunos estudios de la orografía y la situación en donde se dieron estos fenómenos”.
La funcionaria estatal dijo que los pronósticos dan cuenta de que se pueden presentar menos huracanes; sin embargo, se tienen que preparar porque cualquiera de ellos puede impactar a la entidad de manera drástica.
Guzmán Lagunes insistió en que la dependencia a su cargo ya se prepara para lo que será la Temporada de lluvias y ciclones tropicales 2014, en acciones como la limpieza y dragados, y atención en aquellas zonas donde hubo deslizamientos, y sobre todo preparando a la gente para que haga consciencia de que en esos lugares de deslizamientos seguirá habiéndolos si no se toman medidas, como son la reforestación.
Noemí Guzmán Lagunes aseveró que de 212 municipios, 177 presentan graves problemas de medio, alto y muy alto grado de deslizamientos; entonces, quiere decir que nunca debemos de desatender una situación de llamada de atención.
“Ahora, los Atlas de Riesgo ya los podemos tomar como un instrumento de planeación estratégico para esa toma de decisiones correctas; entonces, cada municipio debe conocer cuáles son sus peligros naturales y es por ello que nosotros acabamos de firmar un convenio con el Conafe (Consejo Nacional de Fomento Educativo) en donde vamos con un proyecto piloto para 37 municipios y 409 comunidades, donde la población de esos lugares que es muy pequeña, de 100, 200 ó 300 habitantes, van a poner cuáles son sus peligros, si son inundaciones, deslaves, deslizamientos, ríos o arroyos, cuánta población está en riesgo, etcétera”, finalizó.
