Mientras tanto, el DIF Estatal, a través de la Procuraduría de la Defensa del Menor, la Familia y el Indígena, inició los procedimientos que marca la ley para proteger la integridad física y psicológica del menor, y ejecuta ya los protocolos correspondientes.
El Gobierno de Veracruz condena este lamentable hecho y ratifica que se actuará en el marco de la Ley para sancionar a los responsables.