“No es fácil tomar decisiones sobre esta materia, y por eso creo que la especialización en la misma va a ser fundamental para que podamos contar con una justicia más pronta y sobre todo más eficaz para la ciudadanía veracruzana”.
También —indicó— hay un interés de que los nuevos jueces en materia familiar apliquen figuras interesantes como la perspectiva de género, que se pueda juzgar bajo esa óptica y que se lleve un control de cuál es esa incidencia de asuntos en donde las mujeres, en muchos de los casos, están en desventaja frente a los hombres
Asimismo, en materia familiar, conforme a los nuevos criterios de la Suprema Corte de Justicia y de los tribunales federales, el juez tiene que ir más allá de lo que las partes plantean: tiene que buscar en todo momento la protección de los menores y generar las mejores condiciones para ellos y para poder proteger a una de las partes que se encuentra en desventaja frente a la otra.
De tal forma, destacó que es muy necesaria la justicia familiar, pues permitirá al juez hacer a un lado aquellos asuntos que no tienen trascendencia en la materia, como el incumplimiento de contratos, arrendamientos, y abocarse como un juez especializado a analizar y resolver asuntos que por su complejidad merecen una atención debida.
El consejero de la Judicatura explicó que en las zonas petroleras es en donde se tiene un alto índice de asuntos de lo familiar, como las ciudades de Poza Rica y Coatzacoalcos, en donde el tema de las pensiones alimenticias representa una gran parte de asuntos en los juzgados civiles.
Por último, destacó que después de la creación de los juzgados de lo familiar en los distritos judiciales de Xalapa y Veracruz, para el próximo año se plantea crear otros en Poza Rica, Coatzacoalcos y Córdoba, que es en donde hay un gran índice de controversias.
