El trabajo más pesado lo llevan quienes comercializan el agua en triciclos, por el esfuerzo al que tienen que someterse recorriendo largas distancias, sin embargo las camionetas que también se dedican a esa labor, han tenido que incrementar sus horarios de trabajo, a fin de poder atender dicha necesidad.
La preocupación de quienes han encontrado en el servicio de agua a domicilio un buen negocio, radica en que los pozos artesianos no les permitan seguir abasteciendo la demanda, pues se pronostican intensos períodos de calor que a la par traen sequías.