En su recorrido, personal de la jurisdicción recoge muestras de aves muertas, registran los diferentes tipos de especies de aves que llegan y que emigran a la Isla de Pájaros y así poder tener un panorama más amplio al respecto, que les permita responder a cualquier situación adversa en materia de salud.
Al momento el monitoreo de aves migratorias no ha detectado ningún tipo de riesgo en materia de salud, sin embargo y para garantizar este hecho, personal capacitado seguirá realizando esta labor.