-Su inactividad y compromisos adquiridos a través de los años, la causa.
DE LA REDACCIÓN
El Delegado Regional de Patrimonio del Estado, José Francisco Reyes, resultó ser a todas luces “un cero a la izquierda” en cuanto a su intervención en conflictos sociales protagonizados por invasores de predios privados, fomentando con ello que la problemática avance sin control, por lo que pareciera que no hay autoridad pertinente en Poza Rica y la región.
En las últimas semanas han sido constantes los conflictos por invasiones en esta ciudad y en municipios como Coatzintla, donde habitantes de la localidad de Escolín de Olarte le solicitaron su intervención para aclarar el conflicto, pero el pésimo funcionario público hizo oídos sordos a la petición.
Los quejosos indicaron que en tiempo y forma pidieron el apoyo de la delegación regional de Patrimonio del Estado, en el conflicto de las 20 hectáreas de terreno que son reclamadas por PEMEX, y que el pasado 17 de marzo terminó en un zafarrancho en el Parque Juárez.
Caso similar ocurrió en el conflicto de la colonia Anáhuac, donde de nueva cuenta invasores se apoderaron de un predio de 18 hectáreas, propiedad de trabajadores petroleros; en el lugar también hubo un conato de violencia, mientras que José Francisco Reyes no dio la cara para tratar de resolver el conflicto.
En el caso de la invasión en la colonia El Mollejón, donde un grupo de personas también se apropiaron de predios en los que se reubicó a familias del Cerro del Mesón, y donde los afectados pidieron la intervención de Patrimonio del Estado, tampoco fueron escuchados por el funcionario, quien prefiere encerrarse en su oficina o buscar la manera de sacar provecho de este tipo de ilícitos.
Esto quedó en evidencia en la colonia irregular Javier Duarte de Ochoa, muy cerca del ejido Cerro del Mesón, en donde los invasores acusaron directamente a José Francisco Reyes de intimidarlos con desalojarlos si no le daban dinero; para infundirles miedo, según afirmaron los declarantes, destruyó ocho viviendas con el uso de la fuerza.
Mientras que grupos de invasores se han apropiado de cuanto predio se topan a su paso, las autoridades encargadas de resolver este tipo de situaciones, como el Delegado Regional de Patrimonio del Estado, sólo se limitan a “calentar su silla” y utilizan su cargo para trabajar a favor de sus padrinos políticos.
Ciudadanos se muestran cansados de este tipo de abusos y esperan que sean las autoridades estatales quienes intervengan en los casos de invasión de predios, ya que en Poza Rica no hay autoridad competente que se encargue de la situación.