¿Por qué no empezar las que puedan terminar realmente?, es la pregunta que se hacen transeúntes y conductores. Unos enlodándose y arriesgándose a caer, los otros sufriendo por los ruidos espasmódicos de sus carros a la hora en que pasan por los canales inconclusos que han hecho sobre el pavimento. Conagua debería rescindir el contrato y buscar una empresa con mayor responsabilidad pues al paso que van, la obra quedará completada dentro de varios miles de años, cuando Álamo sea Puerto por los efectos del cambio climático, observa con sorna uno de los detractores.