- Se han vendido un gran cantidad de velas
REDACCIÓN
Cerro Azul
Como es costumbre en los municipios del norte del estado, se continúa con la tradición del Día del Niño Perdido, que consiste en que los pequeños del hogar paseen por las calles sus carritos elaborados de cartón, madera y otros materiales, así como también sigue creciendo la participación en el encendido de velas en viviendas y negocios.
La tradición marca que muchas velas se coloquen a lo largo de las calles para que el niño Jesús que se ha perdido puedan volver a casa, según lo narra un versículo bíblico al que se hace referencia.
Dicha tradición continúa en este municipio y ya se observa desde hace algunos días la venta de velitas por parte de comerciantes de temporada, ubicados en banquetas y de manera ambulante en la zona centro, quienes ofertan por bolsas de 10 velitas o por kilos, teniendo el mismo precio del año pasado.
Cada año las calles y avenidas se iluminan, ya que vecinos de las distintas colonias colocan velitas en banquetas y guarniciones de las arterias, y así sigue creciendo esta costumbre, con el objetivó de que el niño Jesús por medio de esta luz encuentre a sus padres.
El Día del Niño Perdido nace de un pasaje bíblico que narra el día que el niño Jesús se perdió en Jerusalén y sus padres, José y María, le buscaron durante 3 días y le encontraron en el templo platicando con los sacerdotes.