24 de Abril de 2024

Fuego devasta Colorado

  • Reportan al menos mil viviendas destruidas y tres personas

AGENCIAS

COLORADO

Alrededor de mil viviendas resultaron destruidas, cientos más quedaron dañadas y tres personas están desaparecidas tras un incendio forestal que calcinó varios vecindarios en la base de las Montañas Rocosas, al noroeste de Denver, informó un funcionario de Colorado ayer.

El jefe policial del condado Boulder, Joe Pelle, indicó también que los investigadores intentan determinar la causa del fuego que comenzó el jueves.

El fuego atizado por el viento arrasó vecindarios completos en el área entre Denver y Boulder.

Las autoridades habían dicho antes que no había desaparecidos. Sin embargo, Jennifer Churchill, portavoz del condado de Boulder, lo atribuyó ayer a la confusión inherente a la premura de las agencias para enfrentar una emergencia.

Pelle señaló que las autoridades estaban organizando equipos especializados en localización de cadáveres para que busquen a los desaparecidos en el área de Superior y en el condado Boulder. La labor se complicaba debido a los escombros de las estructuras destruidas, los cuales están cubiertos por 20 centímetros de nieve que cayeron durante la noche, agregó.

Al menos 991 viviendas fueron arrasadas, señaló Pelle: 553 en Louisville, 332 en Superior y 106 en partes del condado no incorporadas. Advirtió que las cifras no son definitivas.

La causa del incendio está siendo investigada. Pelle señaló que funcionarios de empresas eléctricas no encontraron cables caídos en los alrededores de donde comenzó el fuego. Dijo que las autoridades dan seguimiento a una serie de pistas y cumplieron una orden de allanamiento. No quiso dar más detalles.

Algunas pistas apuntan a que el incendio fue causado por la caída de postes eléctricos sobre un suelo árido y que las llamas fueron atizadas por ráfagas de viento de hasta 160 km/h.  Las nevadas del viernes y madrugada de ayer frenaron la propagación del fuego.

Por lo menos siete personas resultaron heridas en el incendio forestal que surgió dentro y en los alrededores de Louisville y Superior, localidades vecinas con una población conjunta de 34 mil personas, las cuales están ubicadas a unos 30 kilómetros al noroeste de Denver. Se teme que más de 500 viviendas hayan sido destruidas en esa zona.

El incendio, que quemó al menos 24 kilómetros cuadrados, ya no era considerado una amenaza, especialmente después de una nevada nocturna.

Al menos 15 centímetros de nieve y temperaturas de un solo dígito daban un aspecto estremecedor a los restos de viviendas aún humeantes. A pesar del severo cambio en el clima, el olor a humo aún permeaba las calles vacías bloqueadas por efectivos de la Guardia Nacional.

Voluntarios de la Cruz Roja distribuían calentadores eléctricos entre los miles de residentes cuyas casas no fueron afectadas por el fuego, al tiempo que cuadrillas de trabajadores se esmeraban en reactivar el suministro de gas natural y electricidad.

En los últimos años, el oeste del país ha sufrido incendios sin precedentes, sobre todo en California y Oregón.