AGENCIA
En México, la lepra ya no es considerado un problema de salud pública, puesto que se logró menos de un caso por cada 10 mil habitantes a nivel nacional y subnacional, informó la Secretaría de Salud, pero no debe bajarse la guardia porque “aún tenemos áreas de oportunidad para seguir combatiendo esta enfermedad hasta su control definitivo”, aseguró Jesús Felipe González Roldán, director del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades.
El funcionario destacó los avances en el Programa de Lepra durante el último año, detalló de que 1989 a 2017, el número de casos ha disminuido 97%, al pasar de 16 mil 694 reportados en 1989, a solo 412 en 2017.
Respecto al registro de casos nuevos, comentó que el año pasado reportó 140, lo que significa una tasa de incidencia de 0.113 por 10 mil habitantes. Los estados con mayor índice son Guerrero, Jalisco, Oaxaca, Sinaloa y Michoacán. Mientras que en Tlaxcala, Hidalgo y Baja California Sur no hubo casos en el último año.
Dio a conocer que existe un proyecto de eliminación de la lepra (LEM) en estados prioritarios, en alianza con la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud y otras Organizaciones no gubernamentales, mediante el cual ha mejorado la atención de los pacientes con este padecimiento.
