Explicó que una de las razones por las que más suelen quejarse los consumidores, es por los excesos en la renta de las palapas situadas sobre la franja costera, es la “doble carta” en los restaurantes. “Cuando los comensales llegan, les muestran una carta, con determinados precios, y resulta que a la hora de pagar, cuando les llega un cuentón y reclaman, ya les presentan otra carta con unos costos mucho más altos”, dijo el funcionario municipal.
Lamentó que tal actitud muestre a los visitantes una imagen pésima de este Puerto, por lo cual concluyó que es necesario prepararse, con miras a que la actividad turística se convierta en fuente de derrama económica para toda la región, pues para lograrlo hay que atender con amabilidad y honestidad a quienes lleguen de visita, así como ofrecerles productos y servicios de calidad.
