Si antes era un asunto moral, añadió, hoy es un grave problema de salud, por lo que en coordinación con el Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA) de la Jurisdicción Sanitaria, acuden con un psicólogo que explica a los jóvenes estudiantes el daño emocionalmente que ocasiona el alcohol, correspondiendo a ex alcohólicos explicar el método de recuperación, partiendo de sus propias vivencias y dificultades para superar la adicción.
“Se empieza jugando y al principio da alegría, aunque a un gran porcentaje no le gusta el sabor, sino el efecto de sentirse liberados de temores, traumas, angustias y problemas que provienen del abandono de los padres, la violencia intrafamiliar y desatención en el hogar”, añadió, lamentando que cada vez más mujeres jóvenes se estén sumando a las filas de los adictos al alcohol.
Por último afirmó que las nuevas generaciones cada vez comienzan a tomar a menor edad: a partir de los 11 años, saliendo de la Primaria, empiezan a hacer contacto y ya en la Secundaria empiezan a beber con más frecuencia, gestándose así un problema de alcoholismo al que muchas veces los condicionan otros chicos de más edad, quienes para incorporarse a algún grupo les exigen hacer lo mismo que ellos, siendo más proclives a incurrir en algún vicio aquellos que no estudian ni trabajan, finalizó.
