-En apariencia hay solución, pero la condena es mayor si se practica ese pecado
Por Liz Martínez
“Con quitarse la vida se ‘escapa’ de la vida terrenal, no obstante, se derivan un sinfín de problemas, porque sabemos bien que uno de los mandamientos de Dios es no matarás”, aseguró el Padre Alejandro Uriza Caro, perteneciente a la Diócesis de Papantla.
“Veo que hay una falta de valorización dentro de la persona, también va el de la desmoralización por problemas de carácter de índole personal, familiar e inclusive dentro de la sociedad misma, pero el suicidio es una puerta que buscan para desquitarse de todos los problemas y para salir de ellos, sin embargo, el suicidio no lo es todo”.
Por su parte, el servidor de la Iglesia, Ulises Román Urbano, indicó que muchas veces se acercan a otro tipo de alternativas como el curanderismo, los chamanes, limpias, el tarot, entre muchas otras, pero explicó que en el pasaje de la Biblia de Deuteronomio, Capítulo 18, Versículo 9 al 12, indica que no se debe acudir a ese tipo de prácticas, porque serán aborrecidas por el Señor.
Se deja manifiesto que con este tipo de acciones se regresa a la inmadurez y se detiene en su propio desarrollo personal y rechaza la posibilidad de poder construir su propia vida en la libertad como hijo de Dios.
Es así que los conocedores coincidieron en que se deben acercar a actividades propias de la iglesia, e incluso, Román Urbano dijo que independientemente de la religión que profesen, no dejen de buscar la solución espiritual y que, al mismo tiempo, acudan a la ayuda profesional o los grupos de autoayuda oficiales como los AA, NA, etcétera, que finalmente la Iglesia Católica aprueba.
