-Violencia social avanza porque adultos no inculcan a sus hijos valores de respeto, humildad y honestidad, básicos para una sociedad íntegra
Por MA. CELIA ÁLVAREZ
La profunda falta de valores actual es lo que exacerba las conductas violentas, como el bullying, entre los niños y jóvenes, aunque no es un problema solamente escolar, sino de la sociedad en general, pues también en los ámbitos social y laboral se dan abusos en función de la “diferencia de clases”, pensando algunas personas que poseer más recursos económicos las hace superiores o mejores, indicó Lucero Barra, Licenciada en Psicopedagogía.
Señaló la especialista que un aspecto importante, en el que se debe insistir al educar a los hijos, es en los valores del respeto y la humildad, de manera que el menor aprenda a ser respetuoso con todas las personas, sin distinción de clases económicas; sin embargo, lamentó, se puede observar que las nuevas generaciones, criadas con más libertad, han perdido el respeto incluso hacia sus mayores, comportándose groseramente con sus propios padres y abuelos.
Es de esperar, agregó, que si el padre es una persona altanera y prepotente, como el hijo es su reflejo actuará igual con otras personas, volviéndose racista y discriminando a otros, en función de lo que ve hacer a sus mayores, porque observan y copian todo; en este aspecto, enfatizó, “no cabe duda de que los padres somos los que estamos fallando como personas”, al enseñarles conductas negativas a los pequeños, que después repiten en los planteles.
No es de extrañar, dijo por último, que si el niño ve cómo el padre agrede a la madre, o a otros automovilistas, o a empleados de negocios, etcétera, el pequeño haga lo mismo con sus compañeros de clases, porque es la conducta que le parece natural y por eso la va a imitar, dado que es lo que a diario ve en su hogar, llegando a asumir que tiene derecho a tratar a otros con desprecio o prepotencia, si ve que eso es lo que hacen habitualmente los adultos que lo guían, concluyó.
