-Vecinos de la calle Galeana temen a las lluvias porque se forma un charco enorme y el agua invade las casas, al no fluir como es debido
Por MA. CELIA ÁLVAREZ
Cada vez que llueve empieza el martirio para los vecinos de la calle Galeana, quienes ven con impotencia cómo se va formando un charco enorme que permanece frente a sus casas durante días, debido a que las alcantarillas están literalmente atascadas de lodo, lo que impide al agua fluir como es debido, y por más que han ido a “arreglar” el problema unas cinco veces, todo queda igual.
Señaló don Hilario Hernández Jiménez que el problema es que el nivel del pavimento está muy bajo y ello ocasiona que el agua de lluvia se empoce en la zona, sugiriendo como única solución posible para terminar con ese problema de años, que coloquen “parejo” el pavimento hasta la esquina más próxima y le den la “caída” hacia los drenajes situados en la rúa siguiente.
Aseguró que en días de lluvia torrencial, el nivel del agua encharcada puede alcanzar casi un metro de altura, señalando como prueba la marca oscura que ha dejado el lodo sobre la pared frontal de su propiedad, solicitando el vecindario que emparejen el pavimento y se le dé salida al cauce del agua, para que no se siga metiendo a sus casas y les impida salir a sus actividades.
Señalaron que los muchachos que asisten cotidianamente al CETMAR y a la Escuela Técnica 76 también padecen las consecuencias de estos encharcamientos, viéndose obligados a “chapolear” en el lodo en su trayecto hacia los planteles, por lo que el arreglo de este estropeado tramo de calle, concluyeron, ya resulta imperativo, rogando a las autoridades correspondientes que tomen las medidas que sean precisas.
