-Madres de familia que llevan a sus hijos a la Escuela Primaria “Antonia Nava” piden que retiren de la calle a ancianos abandonados
Por MA. CELIA ÁLVAREZ
La calle Morelos se ha convertido en refugio de indigentes que comen, duermen e incluso hacen allí sus necesidades, a juzgar por el olor a orines que emana del lugar, lamentan madres de familia que pasan a dejar sus niños a la Escuela “Antonia Nava” y se encuentran con el inconveniente de que estos ancianos ocupan parte de la banqueta y dejan poco espacio a los transeúntes.
Explicó la señora Alejandra Rivas que cuando pasa antes de las 8:00 de la mañana a dejar a sus hijos al plantel antes mencionado, halla por lo general a tres hombres de la tercera edad, en estado de abandono, dormidos en la banqueta, y algunas veces continúan ahí el resto del día.
Intervino don José Luis para señalar que se trata de enfermos alcohólicos abandonados por sus familiares, que por esa razón viven en la calle y en condiciones de menesterosidad notorias, sucios, con las ropas ajadas e inclusive uno de ellos muestra feas heridas en uno de sus pies, afirmó, lo cual parece ser síntoma de alguna enfermedad de la que no está siendo atendido.
Coincidieron en que lo idóneo sería que los tres ancianos pudieran ser canalizados a algún recinto donde les brinden cuidados y buen trato, pues se les ve que llevan una vida de abandono y sufrimiento, aunque afirmaron desconocer si existe en este Puerto algún albergue o lugar adecuado para brindarles cobijo y alimento, dada su condición de vulnerabilidad y la imposibilidad de que trabajen, debido a su edad y estado de salud.
