-Por las fuertes lluvias de la madrugada del viernes, muchos trabajadores del campo decidieron no ir a cortar naranja a sus fincas
Por Mayra Rojas Santiago
Luego de las fuertes lluvias que azotaron la región durante la noche del jueves y madrugada del viernes, algunos trabajadores del campo vieron entorpecida la cosecha y venta de sus naranjas, al no poder entrar a sus tierras por temor a quedarse atascados, debido al mal estado en que se encuentran los caminos rurales.
Pocos fueron los trabajadores que decidieron ir a trabajar para cortar un poco de naranja, e intentar venderla con algunos de los negociantes que se encuentran ubicados en la báscula, de la comunidad de Puente Don Diego.
A decir del señor Román, quien se ha dedicado a los trabajos del campo toda su vida, los compradores que sí trabajaron fue porque no metieron los camiones de carga hasta donde están las plantas, sino que se quedaron estacionados en la calle, y los cortadores tuvieron que caminar de la finca hasta donde estaba el camión. “Fue más trabajo, pero lo importante era no perder el día y que nos pagaran el sueldo” indicó.
Pese a que el trabajo es arriesgado cuando el terreno está en malas condiciones, ya que los camiones pueden volcarse cuando van cargados de 12 a 18 toneladas de naranja; cortadores y coloteros de la zona salieron, como todos los días, para intentar ser contratados, ya que afirman que lo que ellos buscan es trabajar.
