-Tuvieron procesiones numerosos católicos
Por LIZ MARTÍNEZ
“La Navidad es una invitación a la unidad, a la concordia, a la paz, a hacer un espacio en la vida personal y social, a Dios, el cual no viene con arrogancia a imponerse, sino que ofrece su amor omnipotente, a través de la frágil figura de un niño”, dijo el Obispo Juan Navarro Castellanos al celebrar la misa en la Catedral dedicada a la Natividad.
Tal como lo efectúan año con año, con la tradicional Misa de Gallo, en las parroquias, capillas y la Catedral de la Diócesis se celebró la Nochebuena; los laicos manifestaron la fe en todos los rincones, anteponiendo la devoción a la diversión, que es parte esencial de la cena navideña el acudir al aspecto religioso.
Aunque la misa se realizaba a la medianoche, los horarios se modificaron y en algunos lugares se celebró a las 20:00 horas, mientras que otros más estuvieron a las 11:00 de la noche en la eucaristía.
De acuerdo a lo que se debe hacer, los fieles llevaron las figuras de sus Niños a bendecir y, otras más, sólo por la oportunidad de acercarse a Dios, porque admitieron que “no habían tenido oportunidad de ir a la iglesia en el año y qué mejor fecha que ésta”.
De esa forma, en las 14 cuasiparroquias, tres capellanías y 41 parroquias asentadas en los 19 mil kilómetros cuadrados del territorio la Diócesis de Tuxpan, en el Norte del estado de Veracruz, abarcando la Huasteca en el mismo estado e incluso de la sierra Norte de Puebla, hubo alegría por esta festividad cristiana.
