-Salen a la luz primeras irregularidades de quien se ha convertido en el dueño de las obras del pueblo
DE LA REDACCIÓN
A dos años de la presente Administración, ya salen a relucir las irregularidades del Director de Obras Públicas, Miguel Aizcorbe Salicrup, periodo que ha sido suficiente para que se llene los bolsillos, sin importar que sus mañas estén afectando no sólo a los beneficiarios de las obras, sino también a las familias que económicamente dependen del poco salario que reciben por ejecutar dichos trabajos, puesto que al no liberar los pagos por las obras realizadas, están llevando a la quiebra a las constructoras locales.
Y es que al menos el ramo de los constructores no se explica por qué a meses de haber entregado las respectivas obras que les fueron asignadas mediante una licitación, no se les han liberado sus respectivos pagos; aunque por supuesto, esto no ha aplicado para todos, ya que sus constructores, “a modo”, sí se han visto favorecidos.
A esto se suman las inconformidades de la población tuxpeña por la pésima calidad de los trabajos que se vienen realizando, ya que debido a las “jugosas” cuotas que les aplica a los constructores para poder cumplir con los pagos o seguirles dando trabajo, las empresas se quedan con muy poco recurso para laborar, y se ven obligados a entregar una obra de mala calidad.
Y es que quienes no le han entrado a su “jueguito”, simplemente les dan largas y largas para pagar o para iniciar con el proyecto contemplado, lo que impacta en la ciudadanía tuxpeña, ya que no logran ver el progreso esperado, haciendo quedar mal a la primera autoridad del municipio, quien ha puesto toda su confianza en él, echando a la basura el resultado de sus gestiones.
Ciudadanos tuxpeños opinan que ya es hora de que Miguel Aizcorbe Salicrup sea destituido de su cargo, puesto que desde la Administración pasada dejó mucho qué desear, y aunque se esperaba que en esta nueva etapa trabajara honradamente, tal parece que la ambición le ganó una vez más y terminó haciendo de las suyas.
Por citar ejemplos, en las instituciones educativas, donde el Municipio debe realizar aulas, padres de familia, que prefieren no revelar sus generales, dijeron que los trabajos entregados son de la peor calidad que han visto, por lo que en lugar de beneficiar, ponen en riesgo a los niños, pues no descartan la posibilidad de que en determinado momento pudiera generarse algún percance, debido a la baja calidad del material con el que fueron construidas y, en cambio, a la hora de entregarlas y especificar los montos de inversión, se manejan cantidades estratosféricas que de ninguna manera fueron aplicadas.
Otro situación se vive en Monte Grande, que aunque tiene únicamente 500 pobladores, el flamante Director ha dejado en el olvido una importante obra, que se anunció a realizarse con siete millones de pesos, donde incluso el año pasado se dio el banderazo para concluir el puente tan necesario que desde años atrás han estado esperando, porque cada vez que hay lluvias, se quedan incomunicados y la población se arriesga a cruzar a pie, sin medir los peligros a que se enfrentan; y es la fecha en que no han podido liberar dicho proyecto.
