En el marco del Día Internacional de la Madre Tierra, el tema a nivel mundial está centrado en las ciudades verdes, a fin de obtener un medio ambiente saludable y sostenible, como parte de esta evolución de las grandes urbes y disminuir los efectos del cambio climático.
Sin embargo, la inversión en tecnología para producir energías renovables, eficiencia energética, reconstruir ciudades, la aplicación en políticas públicas, informar a la ciudadanía y comprometerla con esta transformación está a pasos lentos tanto a nivel nacional, estatal y local, pues se requieren de grandes inversiones y replanteamientos de infraestructuras en zonas habitadas.
Hasta este año, el gobierno del estado instauró licencias de aprovechamiento y control de los recursos maderables, a fin de que, si un árbol es cortado, deben de sembrarse 5 árboles más, esto es una manera de poder continuar con el ciclo de vida natural, pero la lucha contra taladores clandestinos y estudios ambientales dudosos en obras de gran magnitud, ponen en incertidumbre las zonas de reservas de manglares, afluentes y áreas protegidas.
Kenia Orellan Manteca, Regidora Tercera, comisionada en Ecología y Medio Ambiente, mencionó que el poner importancia en pequeñas acciones como colocar la basura en los botes, sembrar árboles o usar menos el automóvil, puede ayudar a disminuir el daño que se ha hecho, pues el cambio climático refleja todos los abusos que hemos tenido con nuestro planeta.
Indicó, que el verdadero trabajo comienza informando a los niños, jóvenes y adultos, dándoles las herramientas necesarias para concientizarlos y que en ellos crezca la cultura del respeto del medio ambiente, una labor difícil al estar luchando contra costumbres de hace años.
Cabe señalar que, al estar en temporada vacacional, no existió campaña alguna que fomente a los estudiantes el respeto a la Tierra, tal y como lo describe los objetivos que establece la Organización de las Naciones Unidas (ONU) este año, en donde para la mayoría de la población el día paso desapercibido.