“Muchos productores están deshaciéndose de su ganado y otros acceden a no ponerse al corriente, sin embargo las consecuencias serán palpables ante la Secretaría de Hacienda, instancia que por derecho podrá declarar un fraude a las asociaciones ganaderas por emitir documentación que no es legal; ambas partes incurren en un delito” puntualizó.
Al entregar facturas inválidas, estas no serán deducibles para los clientes, por lo que los compradores podrían cambiar de proveedor, lo que se traduciría en fuertes pérdidas económicas, agregó Justino Mercado Hernández.
Añadió que no hay razón para que ganaderos de la región sigan emitiendo facturas simples ya que las asociaciones ganaderas están enteradas de que a partir del primero de abril entro en vigencia la factura electrónica y podrían tener problemas de flujo de efectivo ante la imposibilidad de cobrar las facturas inválidas.
Finalmente informó que se están realizando reuniones con productores ganaderos donde se establece la importancia del uso de la factura electrónica y como se pretende regularizar al resto de productores.